NICOLÁS SANABRIA
El Jardín Mudo
El jardín mudo, es un diseño de experiencia al interior del hogar que permite el encuentro y diálogo a partir de una serie de relatos ilustrados, narrados por integrantes de una familia luego del diagnóstico de una enfermedad mental.
Se ha tomado la metodología Doble Diamante como base para el proceso de investigación y diseño del proyecto. Porque se evidenciar en esta un recorrido claro desde el planteamiento de los objetivos y las tareas para la investigación, comprobación del problema y posibles soluciones o salidas gráficas consecuentes al proceso anterior, hasta la bocetación, testeo y posibles iteraciones en el viaje del problema al prototipado.
La experiencia con una enfermedad mental muchas veces es entendida como una experiencia individual, estigmatizada e invisibilizada, debido a una serie de prejuicios presentes en discursos con respecto a la “locura” o revisiones a la misma, que exponen la enfermedad aislada de la experiencia cotidiana. Sin embargo, las familias y entornos con una o más personas diagnosticadas son parte de esta experiencia, entendiendo estos «entornos» como el interior de los hogares, donde se condensan e intensifican.
Objetivo General
Diseñar una estrategia que permita el encuentro y diálogo por medio relatos ilustrados de vida cotidiana narrados por personas diagnosticadas con enfermedades mentales y sus familiares en hogares ubicados en conjuntos residenciales de estrato 2 en Bogotá.
Entrevistas
Se utilizará la herramienta de entrevista a 3 casos, para indagar sobre la necesidad del diálogo en el contexto y contemplar por medio de las experiencias de los entrevistados, cuáles son las dinámicas al interior del hogar y encontrar patrones, relaciones o diferenciaciones en los 3 casos.
Existe una gran variedad de jardines. Hay jardines de flores donde crece con cierta variedad el color en un gran espectro y forma, que requieren afluencias de agua mayores y menores; hay jardines de cactus: suculentas que requieren poca agua y cuyo aspecto logra alejar a quienes los miran por sus púas, pero llaman la atención de manera significativa.
NÚMERO OCHO 